Cómo optimizar la cobertura de tu domicilio tras la reforma
Desde que el internet se convirtió en algo cotidiano en nuestras vidas, siempre hemos relacionado que conectarnos a internet desde casa ha estado relacionado con el ADSL, pero en los últimos años la fibra óptica se ha impuesto frente a esta tecnología. Pese a que su cobertura no es tan extensa, continúa siendo la mejor opción para tener acceso a internet.
Sin embargo, en ocasiones esto no es posible por circunstancias de la instalación, por lo que hemos de utilizar un tipo de conexión inalámbrica o wifi. Esto puede provocar que perdamos potencia en la conexión a internet, por lo que hemos de tener en cuenta diversos factores para poder obtener la misma velocidad e intensidad en todos los dispositivos que estén conectados de manera simultánea a la red.
Saber qué cobertura tiene la vivienda
Para poder determinar la cobertura exacta con la que contamos en casa, hemos de realizar un test de cobertura en la propia vivienda, que podremos realizar de forma online. En la mayoría de los casos, para poder realizarlo no es necesario introducir muchos datos personales, ya que normalmente con indicar nuestro código postal basta. Es evidente que deberás buscar la prueba de cobertura desde la página de la compañía a la que pertenezcas
Hallar el alcance de nuestra conexión inalámbrica
Es un hecho que si nos conectamos de manera inalámbrica al router de casa, no dispondremos de la misma conexión a internet en las diferentes estancias de la casa. Esto ocurre porque llega una cobertura diferente a cada lugar de la casa, por lo que si nos desplazamos nuestra conexión a internet puede variar, lo cual quiere decir que la señal de nuestro router no presenta todo el alcance necesario.
¿Podemos saber exactamente el alcance que tiene nuestra red Wifi? La respuesta es sí, con la utilización de las herramientas correctas podemos elaborar un mapa de cobertura basándonos en nuestra red Wifi, dando como resultado su alcance y la calidad de la propia conexión. De esta manera, podremos conocer hasta dónde tiene alcance nuestro Wifi y además saber en qué zona de la casa colocar el router para aportar una mejor conexión.

No te olvides del ancho de banda: de 2,4 GHz ó de 5 GHz
Si tenemos una banda de 5 GHz debemos ser conscientes de que la señal es más débil y su alcance a las diferentes partes de la casa es menor, pero en muchos casos es la mejor opción de las dos ya que es menos sensible a posibles perturbaciones. Es necesario evaluar ambas alternativas para saber cuál nos conviene más. Por ejemplo, nuestro teléfono móvil podría funcionar mejor en nuestra habitación a 5 GHz, pero en el salón la banda debería ser a 2,4 GHz porque funciona mejor.
La banda de 5 GHz tiene la ventaja de tener 25 canales que no se superponen en comparación con los 14 de la banda de 2,4 GHz. Sin embargo, tiene la desventaja de que la distancia a la que puede trabajar es menor.
Cambiar tu tarifa de internet
A veces sucede que nuestra operadora telefónica no nos ofrece una buena conexión, por lo que la mejor solución es valorar las diferentes ofertas de internet que ofrecen otras compañías.
Para saber si el paquete de internet que tenemos cubre nuestras necesidades actuales, debemos evaluar cuántos dispositivos están conectados a la red Wi-Fi al mismo tiempo: ordenadores, teléfonos móviles, televisores, tabletas o incluso electrodomésticos inteligentes. ¿Por qué? Porque todos estos dispositivos consumen mucho ancho de banda y no todos los planes de Internet pueden proporcionar una buena conexión a Internet en estas situaciones.
Lo mejor es contactar con empresas que ofrezcan ofertas de fibra, fijo, móvil y TV para evitar la saturación de la red por conectar tantos dispositivos a la vez. Por tanto, con este tipo de ofertas podemos asegurarnos de tener una correcta distribución de ancho de banda entre ellos, evitando posibles interrupciones o pérdidas de conexión.